
San Ignacio: vecinos continúan con medida de fuerza contra la instalación de planta de tratamiento
Desde el pasado 27 de agosto, los vecinos del barrio Resistencia de la ciudad de ...
Desde el pasado 27 de agosto, los vecinos del barrio Resistencia de la ciudad de San Ignacio, Misiones, iniciaron una manifestación en el portón de acceso del exmatadero municipal que se encuentra en el lugar, por el rechazo a la construcción de una planta de tratamiento de residuos cloacales.
Y desde la semana pasada, cinco vecinas, de las cuales dos están embarazadas, decidieron encadenarse en el portón hasta lograr un acuerdo de llevar la obra a otro sector de la ciudad.
El objetivo del proyecto es la construcción de alcantarillado sanitario, planta de tratamiento de residuos y mejoramiento del sistema de agua potable, emprendimientos del Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC).
Los vecinos recordaron que no están en contra del proyecto en sí, pero sí en contra de la construcción de la planta de tratamiento de residuos en el barrio, ya que, según los datos que manejan, dicha planta ocasiona olores insoportables, además de acarrear enfermedades y otras consecuencias para la salud.
En ese sentido, nuevamente lograron reunirse con la intendenta de la ciudad, Cristina Ayala (ANR), para pedirle que se pueda buscar otro lugar alejado de la población, en donde ninguna tercera persona salga afectada por la planta de tratamiento.
“Tuvimos una reunión con la intendenta Cristina Ayala, para presentarle nuestra inquietud y solicitarle el traslado de la obra a otro lugar. La misma nos mencionó que no se podrá realizar el cambio, entonces seguimos con la misma postura”, explicó Eusebia Mereles, vecina del barrio.
Por su parte, la intendenta Cristina Ayala indicó durante la reunión: “Hicimos todo lo posible para buscar una solución a esta problemática, pero no hay posibilidad de cambio de lugar de la planta de tratamiento. Entonces, lo único que podemos hacer es nuevamente la socialización de este proyecto en una audiencia pública”, dijo.
Tras este anuncio, los vecinos rechazaron dicha propuesta de la ejecutiva municipal y continúan con la medida de fuerza y encadenamiento en el portón de acceso al exmatadero municipal, para conseguir el cambio de lugar de la construcción de la planta de tratamiento de residuos.
La obra demandaría una inversión de 14 millones de dólares, provenientes del Banco de Desarrollo de América Latina y el Caribe (CAF), y el encargado de estos trabajos es el Consorcio Rovella - Tocsa.