La Depresión Aislada en Niveles Altos (DANA), también conocido como “gotas frías”, ocasionó más de 200 muertes el año pasado en España. Diversos organismos resaltan que esos efectos adversos climáticos podrían ser cada vez más frecuentes e intensos.

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“No podemos medir que, en un momento dado, tengamos frío extremo en un determinado punto del planeta y calor extremo en determinado punto del planeta, como dos cosas divergentes y diferentes. El sistema climático es uno solo. Lo que se haga en un punto impacta totalmente en un punto lejano. Las mediciones indican estos cambios y los impactos justifican estos cambios”, reflexionó Julián Báez Benítez, director de la Oficina Regional de Organización Meteorológica Mundial (OMM) para las Américas.

Asimismo, resaltó que la recomendación a nivel mundial actualmente es precisamente la de fortalecer los sistemas de alerta temprana para que se puedan detectar los eventos extremos y tomar precauciones para preservar la vida.

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En este contexto, Báez señaló que Paraguay tiene solamente un radar meteorológico para detectar ese tipo de efectos climáticos adversos. “Desde el punto de vista del territorio, no es suficiente uno, abarca Asunción y algunos puntos de Central. Se hizo un estudio y el Paraguay mínimamente necesita tres para cubrir su territorio y las áreas más pobladas”, manifestó en contacto con ABC Cardinal.

Contó que este radar se encuentra en el campus de la Universidad Nacional de Asunción, en la ciudad de San Lorenzo, y fue adquirido aproximadamente hace 20 años. “La Dirección de Meteorología administra el radar meteorológico desde el 2015″, señaló.

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