Paseo “tricolor” en Juan León Mallorquín

Trámite con una notable superioridad de Nacional, que desde el pitazo inicial demostró sus intenciones de llevarse los puntos y lo tradujo en el marcador al amanecer del partido. Esto fue posible mediante una transición rápida que derivó en un dos contra uno de los Caballero ante Rodas; Gustavo transportó el balón y le sirvió el gol a Tiago, quien eludió a Wastowski para luego definir con el arco vacío.

Cerca del primer cuarto de hora el “rojo“, que como pocas veces demostró flaquezas defensivas, se valió de una acción de pelota quieta para emparejar el marcador. Una “jugada de laboratorio” que contó con el tiro libre de Giménez, quien con un pase rasante a la medialuna encontró a Teodoro Arce. Este ejecutó un derechazo de primera que se coló al costado izquierdo de Ortiz.

La Academia nuevamente activó su voracidad, propiciando grandes intervenciones de Wastowski. Pero antes de que cerrara la primera mitad, volvió a pasar al frente con un tanto que nació en un pase magistral de Arrúa, que dejó a Gustavo Caballero de cara al gol y, con una definición mordida, terminó firmando el segundo de su equipo.

En la etapa complementaria el Tricolor no se conformaba con la mínima ventaja, mientras que el dueño de casa dependía en demasía de lo que podía ofrecer Arce, quien generaba un desequilibrio insuficiente por el nulo acompañamiento ofensivo. El visitante llegó al tercero mediante un tiro penal de Gustavo Caballero, luego de una infracción con tinte polémico de Fernández sobre Fabrizio Jara.

Pasando la hora de juego la visita hizo abultada la diferencia en una acción que desnudó las falencias del “rojo“, muy displicente para no poder despejar un control deficiente de Arrúa habilitó con un puntín a Prieto, y este, con un derechazo a quemarropa, firmó el cuarto.

Ya en tiempo de adición, el elenco de Ka’arendy redujo la diferencia con el autogol de Cañete, quien en su intento de controlar un centro de Franco vio cómo el esférico se le escurrió y terminó al fondo de la red.