“Ser papá para mí es la obra más grande que tengo”, expresó Nicolás Manuel Ozuna. Trajo al mundo tres hijos: Diego Ramón, Luz Cristal y Nicolás, pero experimentó la tristeza y el dolor de perder una hija ya que Luz Cristal murió al nacer.

Sus dos hijos vivos siguieron sus pasos; el mayor Diego Ramón ya se dedica al oficio y el segundo, de nombre Nicolás como su padre, está haciendo sus primeras armas en el arte de crear a través de la artesanía. “Mi papá es todo para mí, le tengo como referencia, es hermoso lo que hace, espero ser como él” expresó orgulloso el hijo menor del artesano.

Don Nicolás Ozuna, recordó la primera experiencia de ser papá como un gran desafío y se muestra contento porque sus hijos ya crecieron. “Fue una gran alegría para mí, pero también todo un desafío, no fue fácil, en este oficio de artesano no hay garantías de ingresos permanentes, uno debe crear su propio capital y eso muchas veces es difícil”, manifestó, y en ese sentido, destacó el gran papel de su esposa Dominga, a quien valoró como la gran compañera de lucha. “Ella es mi compañera de lucha de toda la vida, siempre está conmigo, es muy trabajadora y una excelente mamá” refirió.

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Finalmente dejó un mensaje a los padres: “Cuiden y amen a su familia, porque la familia es lo más sagrado que tenemos y es la base de todo”.